Me saca de quicio cuando en una conversación me dicen eso de “ciao”, me parece súper frío.

Me gustaba picar o mejor dicho chinchar a ese chico por teléfono, su “algo” hacía existir un pequeño sentimiento que me hacía pensar en él de forma intermitente.

Igual seré muy radical con la gente cuando me dicen ese “ciao”, odio decir adiós, “adiós” lo digo cuando estoy cabreada. Tuve un novio que cuando peleábamos acababa por mensajes diciendo “vale pues ciao!” Y me causó tanto daño eso que cuando un tío me dice esa palabra, recuerdo malos episodios de mi vida y decido pasar.

Me gusta que me traten con interés, con cariño, con locura… pero no con borderías.

Cuando mi corazón me dice “pasa”, yo paso. Me gustaba, una mujer cuando se mete con un tío es porque le gusta mucho, yo no sé cuánto me gustaba, no me dio tiempo a conocerle, soy muy fan de fijarme en amores de un pensañeo al primer “hola, cómo estás?” Luego esa simpatía se deteriora a medida que le vas conociendo cuando las migajas de su tiempo son para ti antes de irse a la cama.

Esta mañana estaba soñando con él, en mi sueño estábamos tomando una cerveza de risas y yo estaba feliz, era un sueño decente, lo único diferente de ese sueño fue que en él me besaba, un beso que hubiera levantado mi estado vulcano y roto mis miedos, un beso que llevo mucho esperando en mi tiempo muerto con los hombres, un beso que apague el infierno de todos mis pecados.

Era un sueño y el mejor beso que me dieron en mis sueños. Dicen que si cuentas un sueño no se cumple, yo lo he contado porque de todas formas en mi vida mortal no va a pasar, yo tan Disney y él tan frío… no gracias! El hielo me gusta en un whisky etiqueta negra y en vaso bajo.

Fue raro despertarme de ese sueño tan bonito y parecía tan real que al mirar mi teléfono para mirar la hora antes de levantarme para ir al trabajo de mi madre, vi que él me había escrito al Messenger del Facebook.

Existe realmente esa conexión mental entre dos personas? 🤔

Soy una loca a la fuga, tengo miedo de fijarme de verdad en alguien y llevarme el mayor de mis chascos.

Él era todas mis alegrías que empezaron con la letra “A”. A veces yo parecía gustarle, a veces yo olvidaba mi vida Lunar, a veces podía volver a creer en algo o alguien cuando hablaba con él, a veces pude sentirle hasta en mi piel al cerrar mis ojos… A mí me gustabas.

Bueno gente, otro episodio de mi vida que ha pasado y para eso aparecen personas en nuestra vida, para que pasen cosas raras como esta.

Os quiero gente!! 😘❤️❤️